Desde el Hostel Villa Lodosa, tenemos la posibilidad de adentrarnos en el monasterio de Iranzu, oculto en el verde valle de Yerri, en una zona apartada entre montañas, se encuentra el monasterio de Santa María de Irantzu,grandiosa abadía cisterciense construida entre los siglos XII y XIV. Su claustro gótico, elegante y austero, es uno de los rincones más bellos del monasterio, que invita a descubrir las diferentes dependencias del cenobio reformado en 1942.
Cruzar el cañón hasta Iranzu ahora es fácil de hacer, pero en el siglo XII, los primeros monjes cistercienses habrían pensado «el camino del Señor es insondable», o «nos han perdido estos andurriales». Bueno, tal vez por los diseños de los padres fundadores, sugirieron que el templo se construyera en «un lugar apartado con mucha agua». Además, tiene agua. Llamaron al monasterio Santa María de Iranzu, que en euskera significa Santa María de los Helechos o Helechos. El nombre es bonito, y el templo lo es aún más.
La fachada principal es muy solemne, y las únicas decoraciones son las que se encuentran en los arcos de medio punto abocinados de la entrada. Para la iluminación de la capilla central, hay un ojo y una abertura lateral.
A partir de finales del siglo XII y continuando hasta el siglo XIV, esto explica las diferencias estilísticas que encontramos, desde los arcos de medio punto en el más primitivo estilo cisterciense puro, hasta los arcos góticos plenos con arcos apuntados y elaboradas tracerías.